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Algunos libros recientes (diciembre 2021)

Algunos libros recientes (diciembre 2021)

LA GUACHA NÚMERO 52 (SEPTIEMBRE 2021). A.A.V.V. Dirección de Javier Magistris y Claudio Lomenzo.

Un nuevo número de la revista que desde hace más de veinte años es una alegría encontrar en los puestos de ventas de diarios. En su clásico formato tabloide, el número trae una conmovida nota editorial que explica que uno de los ejes del número es rendir homenaje a algunos poetas que han muerto durante la pandemia de coronavirus. Hay entrevistas a Claudia Masín, Alejandro Schmidt y Alejandro Cesario; estudios críticos sobre la poesía de Pablo Seguí, María Eugenia Rapp y Susana Thenón; homenajes a Rodolfo Alonso y Jorge Rivelli. Y como siempre, mucha poesía.

Compartimos un poema de Claudia Masín:

ALL THAT JAZZ

                      Que no se sepa nunca si fue batalla o danza
                                              Arthur Rimbaud

Hay un ritmo en todas las cosas, las tristes
las deseadas, las hermosas, las temidas,
las horribles. Yo lo robé, lo hice mío. No es
un ritmo sostenido ni armónico.
Está quebrado, está roto y yo estoy roto
y por eso puedo
sentirlo en los huesos: empieza
sin dirección y sin sentido, se agita, lucha
temerariamente contra el silencio
y se termina. No tiene un para qué, no hay razón
para romper el magma, diferenciarse,
ser el relieve pequeñísimo en lo llano, el accidente
en el terreno vacío. Habría
que quedarse en lo indistinto,
habría que fundirse en algo más grande,
ser una partícula que no desea nada: ni nacer ni morir
ni moverse del lugar en que se ha caído. Pero hay
una vibración que sacude
a los muertos o a los nunca nacidos. Nos inquieta
como a las piedras el comienzo del terremoto:
ellas no saben, no podrían
saber qué les espera, se dejan llevar, empujadas
por una fuerza irresistible,
desconocida. ¿Para qué la agitación, el ansia
en el núcleo de algo que va a volver
a aquietarse como si nunca
se hubiera movido? Te espero,
como esperaba el mundo en el inicio la explosión
que lo despertaría: con esperanza
y con terror. Soy la materia
que va a encenderse y bailar en el aire
como baila lo que nunca estuvo vivo
y va a morir. No tendremos
más que el momento de esplendor antes de irnos
sin dejar huella de haber
estado aquí, y no es mucho pero alcanza
para las flores que se abren una vez
y se marchitan, por qué no habría
de ser suficiente para mí, para los dos.

**********

LA FELICIDAD DE LOS ANIMALES – OBRA REUNIDA 2000/2021 (Bajo la luna, 2021) de Sonia Scarabelli.

Sonia Scarabelli (Rosario, 1968) es una poeta excelente, y esta obra reunida (siete libros, dos de los cuales se publican por primera vez ahora) es una oportunidad perfecta para conocerla, o para volver a leerla desde una perspectiva de conjunto. Poesía lírica, humilde, en el sentido que la poesía lírica siempre es humilde, la pequeña voz inmensa del mundo, modulada por alguien que ve, siente y sabe encontrar el ritmo y la palabras.

Compartimos dos poemas:

LOS COMEDORES DE PAPAS

Yo no recuerdo estar
frente a la lámpara
ni tampoco la mesa de madera,
pero los rostros sí, los ojos
con aquel paño de tristeza enormes
y el olor a la leña
llenando todo de un humo que apenaba,
no el humo celebrante
de las fogatas de San Juan, no el humo
de las hojas ardiendo en la vereda
sino más bien un humo
en el que parecía fueran a quemarse
todos los sueños de la vida

¿En qué pensó mi padre ante ese único
alimento rodando entero
el mediodía?

Sólo un plato de papas y todo
el tiempo por delante,
el largo día entre los hijos

Lujosas me parecían a mí
que aún sin dolor miraba
el vaso medio lleno
y no la pérdida
el hondo plato de la pérdida
servido
tan blanca, blandamente

ABEJA

Ahora que ya hablé,
y dije algunas cosas
que tenía que decir,
soy libre. Me voy
por el corredor de las abejas.
Se me resbala una pata,
se me dobla una antena,
se me tuerce un ala.
Todavía tengo
que hacerme más chiquita,
todavía tengo que disminuir,
todavía necesito
zumbar más cerca de las flores.
Ah, ¿cuándo, finalmente,
pasaré, cruzaré?

**********

LE PREGUNTÉ A MI SOMBRA (La carta de Oliver, 2021) de Fernando Kofman.

Nacido en Misiones en 1947, Fernando Kofman ha ido construyendo a lo largo de sus sucesivos libros una voz muy personal que trabaja la poesía como una zona de autodescubrimiento y develación.

Compartimos dos poemas:

LE PREGUNTÉ A MI SOMBRA

Le pregunté a mi sombra
quién piensa detrás
de mí, quién se apropia
de mis ideas,
y un grupo de helechos
dijo: nadie.

Me abrí paso en la
media tarde, bajo la mirada
atenta de los mendigos,
o de algunos comerciantes.
Y no molestó a mi sombra.

Ella brotó de mí
como el filamento de
alguien que camina
y retorcede.
Quise elevarme por
encima de los arbustos
y fui apabullado.

Pude reacomodar algunas
ideas, pero mi sombra
las retrotajo. Las
hundió en un pozo,
y me dijo: no estás
aquí para pensar.

LOS ESCRIBAS

Me bajé de ese tren
en una estación vacía.
En la boletería atendía
mi sombra, y ella
llevó mi equipaje,
hasta dejarlo en un hotel,
atendido por marionetas.

Puse mi afeitadores
eléctrica en movimiento,
para quitarme los bulbos
que mi sombra dejó
en mi cara. Ella se
alejó por una ancha
alameda, ocultando su risa.

Es que a otros les sembró
la cara con líquenes, y
a los que le rindieron
culto, tachonó sus
ojos con monedas de
oro. Eran escribas que
le rogaban tener más
resplandor que el sol.

*********

LA MALEZA DEL JARDÍN (Elemento Disruptivo, 2021) de Nadia Sol Caramella.

(EGC)

Nadia Sol Caramella despliega aquí un ejercicio de paisajismo poético con una apuesta clara: en la maleza hay un mundo por descubrir, un mundo que se contempla con la sobriedad de quien participa de esa naturaleza como vigía. Se suceden así los gatos y los pájaros y las flores como los días, en una introspección paciente, en una mirada que se deposita en lo pequeño, pero aspira, por momentos, a lo universal. Sin embargo, quizás sea en esos poemas donde las sentencias no apresuran la brevedad, donde las abstracciones no buscan clausurar la experiencia individual, donde la maleza, como principio del desorden, brilla con el verde más intenso.

*

la encontré en un rincón
detrás de la puerta
era chiquita, oscura y deforme
temblaba a pesar del calor
daba pequeños saltos
y emitía un quejido intermitente
la tomé en mis manos
y la solté en el jardín
junto a los malvones
ahora la soledad crece en el barro
bajo la lluvia del domingo
como las otras flores

*

no importa
si es tarde para volver
a casa
tampoco importa
cuánto tiempo
pasaste en el bosque
importa
que tus pies hayan sentido
la tierra mojada
y que los animales
te hayan contado
sus secretos
y que vuelvas a casa
a escribir tus sueños
ahora que la noche
te encendió
como una llama salvaje

**********

JARDÍN (Camalote, 2021) de A.A.V.V. Antología a cargo de Fernando Kosiak.

Después de la publicación de Flotar, una antología federal de cien poemas sobre el río, Fernando Kosiak retoma la tarea: Jardín es una antología de cien poemas sobre flores escritos por cien poetas de toda Argentina, de las más diversas trayectorias, edades y poéticas. Así, en este libro que se abre con Diana Bellesi, conviven voces que dan forma a un paisaje posible: Estela Figueroa, Andi Nachon, Santiago Venturini, María Teresa Andruetto, Alejandro Méndez, Fedra Spinelli, Eleonora González Capria, Susy Shock, y noventa y dos poetas más.

Este no es un bouquet ni un ikebana, no es un ramillete ni un arreglo. No hay aquí, como dice Kosiak en las palabras preliminares, flores muertas: “El jardín es la forma viva de las flores, también es el lugar donde a veces duran menos”. Esta es una celebración colectiva de la belleza de lo efímero.

PULSO (CARLOS BATTILANA)

Nace el día. Con esfuerzo
de construcción
se evapora la luz. Hay flores
que se deshacen
apenas las toco, tallos
que ya no me pertenecen.
¿Qué es esta
disolución,
este viaje tan al revés? Flores marchitas
en el corazón
aire suave
viento fresco
que alguna vez fue
el abandono feliz
el núcleo
intensísimo
de cada verano.

INSTRUCCIONES (JULIETA TROILO)

el otro día mamá vino a casa
trajo instrucciones para los helechos

y la floración de los rosales

hice lo que dijo sin dudar
el helecho bebió de noche
el rosal floreció al tercer día
después, para que vea el resultado
le mandé una foto de mi balcón

silenciosa, la oí pensar
en la perfección de la obediencia

**********

POESÍA COMPLETA (Ediciones en Danza, 2021) de Irene Gruss.

Irene Gruss (1950-2018) es considerada una de las poetas más importantes de la Argentina. Esta obra reunida permite disfrutar de su poesía, a secas, y también captarla desde una mirada más panorámica, de conjunto.

Compartimos dos poemas.

BALCONES

Esa vieja a lo lejos apenas puede colgar en la soga un repasador,
antes lo retorció pero ya no como antes,
cuando la fuerza era ciega y
eran sábanas, toallones, el mameluco de su hombre, los
infinitos
calcetines, no, ahora ya no,
apenas da en el blanco con ese broche
y lo aprieta, se agarra de la soga.
Suspira.
De pronto mueve su cabeza,
ve que la estoy mirando, la saludo como si la conociera.
Sonríe y
va hasta la maceta del malvón, me la ofrece
entre los cables, el aire que nos separa.

POEMA

El sol cosquillea en mi nuca.
Estoy lavando de espaldas
al sol
y de repente
sonrío
porque el sol cosquillea en mi nuca.

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ELFO CORPORATIVO (Promesa, 2021) de Rita Gonzalez Hesaynes.

“Había una vez… y, como en un cuento clásico infantil, lo que sigue es la desgracia –dice la contratapa de Olivia Milberg–. Pero en este caso,no hay final. Ni terrible ni feliz comiendo perdiz. No hay moraleja. Hay, en cambio, una rueda infinita de hámster que gira sin parar y una voz que rechina atrapada en su interior.

La rueda es un juego que no se puede abandonar, porque promete felicidad -¿y si el jugador se detuviera, a dónde iría a parar?

La lectura de estos poemas es una experiencia desesperante: se escucha el balbuceo de otro mundo, como un paraíso perdido. Prohibido el ingreso, la opción es una sola: te sumás a la ronda.

Rita Gonzalez Hesaynes construye un discurso poético híbrido, se cruzan el registro publicitario, el lenguaje de las redes sociales y el de los programadores, la mitología nórdica, la ciencia ficción y lo maravilloso. Los poemas se intoxican con basura de internet, con la aparición viciosa de las Fuerzas Armadas, el croar de los fabricantes de armas, slogans, propagandas, pollos a medio descuartizar. La voz atrapada en la rueda muestra la violencia que se ejerce en lo público, lo doméstico, lo laboral. Muestra, finalmente, la violencia que corroe la intimidad del pensamiento, emulando los ecos deformados que aparecen cuando se escucha con atención sensible: Del 1 al 10, ¿qué nivel de confianza tenés en que vamos a cumplir el objetivo del sprint? / ¿Del 1 al 100? / ¿Del 1 a l infinito? / Del 1 al 10, ¿qué nivel de confianza tenés en tu confianza?”.

Compartimos un poema:

GALGOS NEGROS ACELERANDO

querida pared
nos encontramos de frente otra vez
me brota sangrezuela a cucharadas
y vos
sos la carcajada solitaria que me espera al final
esta vez hecha de tabiques
y de pintura al agua

deberíamos
celebrar nuestra alianza
pero la muerta en mí que se embriaga con tu copa de cobre
es siniestra
y va escupiendo espuma entre los dientes

estás en todas partes como un único dios
me rodea tu cuerpo matemático
rectángulos firmes de limitaciones
donde las ventanas son tus ojos
pared
no tus agujeros
a través de ellas miro lo que ves
y la calle está empedrada de niebla
sobre la que corren carros negros

sé que sos mi enemiga
pared
aunque cuelgue en tu cuero nis cuadros y mis cruces
y me oculte detrás de tu regazo
cuando vienen a buscarme las pestes

aunque yo también mire
y mis ojos sean sobre todo ventanas
de la limitación de tener cuerpo
y no vea más que una calle de niebla
y encima galgos negros
acelerando

*********

 

LA JORNADA (Editorial Ciudad Gótica, 2020) de César Bisso.

El libro está estructurado a partir de las sucesivas estaciones de ferrocarril, en lo que adivinamos es el habitual viaje de ida y de vuelta del autor para trabajar en Buenos Aires (Domingo Cabred – Retiro – Domingo Cabred). A lo largo de las páginas va configurándose una voz genuina, que se gana nuestra simpatía por su sencillez y verdad.

Compartimos dos poemas:

PILAR, 06:59

Estoy en pleno viaje.
Poco importa adónde voy.
¿Cerca? ¿Lejos?
Solo sé que habré llegado.
Y sabré volver, si alguien espera.

Enjambre de manos aferradas
al designio de teléfonos móviles.

Criaturas del silencio
que no preguntan adónde van
ni cuándo darán la vuelta.

Partir y regresar, día tras día,
la única forma de no estar muertos.

BELLA VISTA, 17:57

Los pájaros anidan exaltados.

Un caserón sin tejas espera
el retorno de las sombras.

Los fantasmas salen a jugar
al parque despellejado.

El miedo espía desde una alcantarilla.


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